Daniel Sabater se despide del “No Me Quiero Pegar Tour” por todo lo alto

El pasado viernes 14 de junio Daniel Sabater despedía la gira en honor a su último EP “No me quiero pegar” en Madrid, un concierto muy especial por ser el cierre de la gira y porque se tuvo que posponer de su fecha inicial en mayo.

El público madrileño estaba ansioso por descubrir qué sorpresas tenía preparadas el artista murciano para la noche.

El grupo Moanday se encargó de dar apertura al concierto cantando alguno de sus temas como “MALDEAMORES” o su último lanzamiento “10 years”. Desde el minuto uno lograron conectar con la sintonía del público, y consiguieron hacerles saltar sin parar durante toda su actuación.

Tras este maravillosos inicio de noche, quedaba más que claro que el nivel estaba muy alto y que las expectativas (ya de por sí muy altas) serían superadas con creces.

Daniel arrancó la noche con algunos de sus temas más antiguos pero conocidos por un público que no dejó de cantar en ningún momento, desde las canciones más recientes a las más antiguas como “Nosotros 2” o “Jugando”.

Ya con el público totalmente entregado, el cantante dedicó unas palabras muy emotivas hacia su abuela y hacia su familia, que se habían desplazado desde Murcia para ir a verle tocar en una noche tan especial. A todos ellos les dedicó “Bolero de desamor”, una de las canciones más distinguidas dentro de su discografía, y que demuestra una vez más la versatilidad del artista para moverse dentro de distintos géneros musicales.

Cuando el concierto ya iniciaba la recta final fue el turno de “Estrés”, el último single del artista que había sido estrenado la noche anterior, pero que tuvo una gran acogida por parte del público que conocía la letra como si llevaran años escuchándola. Además el cantante nos deleitó con dos grandes sorpresas más, una canción inédita y la presencia de Walls en el escenario para acompañarle juntos en su tema “Partirme la cara”.

En la recta final del concierto sonaron algunas canciones más recientes de este último EP como “Inconformista”, “Saco de boxeo” o “No me quiero pegar”, canción que da nombre al propio EP y al tour. El público se dejó el alma en estas últimas canciones, sobre todo después de que el cantante confesara que hablaban de una época complicada de su vida.

Sin duda alguna el concierto del viernes fue un sueño para todas aquellas personas que estuvieron allí para presenciarlo, un vaivén de emociones entre la rabia y nostalgia hasta el amor. Fue el mejor cierre posible para esta gira, y tanto el público como el artista se encargaron de demostrarlo.